viernes, agosto 25, 2006

Cabeza de tele





Bendigo las posibilidades que nos ofrecen los nuevos medios tecnológicos, la cara amable de la globalización que permite el acceso a bajo costo a tanta información y ha democratizado ciertos bienes de consumo como las películas, que tanto me gustan (aunque creo que no tanto como a mi amiga P, que es pegada con el cuento y se veía de a tres por tarde, cabeza de tele). Odio los programas de la tv chilena abierta: con algunas excepciones la mayoría me parecen un insulto a la inteligencia, pero me gusta ver películas buenas. Buenas no significa necesariamente que el filme sea de gran contenido artístico, sino que me guste y que me deje algo, sencillamente; igual siento que tengo buen gusto. O buen mal gusto también. Como sea, esta es una lista breve de mis favoritas, en orden a la chilena, es decir sin orden:
Closer: por que me la acabo de repetir, y me sumerge en un estado de melancolía. Película que retrata con crudeza y sutileza al mismo tiempo los retorcidos rumbos que a veces toman las relaciones sentimentales. Me gusta por lo mismo que me cautivó La insoportable levedad del ser, la novela de Kundera: por la insoportable levedad del ser.

El señor de los anillos: nunca me interesé en los libros de Tolkien, pero la peli me dejó pegadísimo, por su brillante realización, perfecto equilibrio entre cine comercial y artístico. Por que tengo mucha onda con la edad media también (hoy en la noche es la fiesta de san Agustín, a todo esto: guiño a los historiadores de la cato), y por que, aunque se trata de una obra de ficción, presenta, bajo la forma de una cuento, cuestiones existenciales y valores super profundos y universales: la lucha entre el bien y el mal, la lealtad, el valor, etc. Por último, pero no por menos importante, por ciertas imágenes de antología, como la de los espectros negros cabalgando con una música épica, dramática y terrorífica. Buen cine, en suma, como para verla con tus hijos si los tienes, muy educativa.

The fearless vampire killers: del Polanski de los sesenta. Cacho que me gusta Polanski , pues sin proponérmelo me he ido haciendo de varias de sus pelis. Esta en particular por que es genial: una historia de vampiros con tintes de comedia, magistralmente actuada por el dúo protagónico del professor Abronsius y su ayudante Albert (Polanski actuando como un pendejo algo despistado y romántico-hormonal, devoto discípulo del profe), con esa belleza que fue Sharon Tate (¡Dios mío, se parecía a mi suegra!...), y con una fotografía y ambientación muy especiales y logradas (el castillo y las escenas de la nieve, que parecen del cine mudo de los años 20: Polanski haciendo vintage cuando no se creaba el término). Mucha imaginación, ironía con su toque oscuro, mezcla de recursos estéticos al servicio del guión....una sola frase que leí de niño en "Buen Domingo", el suplemento dominguero que traía la Tercera a principio de los 80 (¿¿Existe la primera me pegunto?); un pequeño reportaje a su persona y su obra titulado "Polanski: un demonio genial". Acá en Chile la vi de chico doblada al español en la tv, y me fascinaba y me cagaba de susto al mismo tiempo. El título lo tradujeron como "La danza de los vampiros", por la escena del baile en el castillo.

Gato negro, gato blanco: por que es una historia muy sencilla, pero de gitanos. Me cago de la risa con el vitalismo de los personajes y su estética colérica.

Antes de amanecer y Antes de anochecer: por que, como Douglas, sigo romántico. Por que me ha pasado eso de conocer gente por conección espontánea, aunque no en Viena, y por que es una peli de diálogos, y a mi me gusta conversar.

The Commitments: por que me gusta la música y las bandas de rock, aunque en este caso es soul. Por que me llaman la atención Irlanda y los irlandeses; siento como una sintonía con ellos cuando oigo su música o los veo en las pelis, pero también por que al film es estupendo, los personajes muy bien caracterizados (Joey "the lips": ¡genial!) y diferentes y la banda sonora está bacán.
Después sigo.